La Fiscalía de Estados Unidos anunció que no solicitará la pena de muerte para Miguel Ángel Treviño Morales, alias “Z-40”, y su hermano Omar Treviño Morales.

Agencias
Washington.- La Fiscalía de Estados Unidos anunció que no solicitará la pena de muerte para Miguel Ángel Treviño Morales, alias “Z-40”, y su hermano Omar Treviño Morales, conocido como “Z-42”, exlíderes del cártel de Los Zetas. Ambos fueron extraditados desde México a principios de 2025 para enfrentar cargos en una corte federal en Columbia, donde se les acusa de delitos relacionados con narcotráfico, lavado de dinero, homicidios y otros crímenes cometidos en México y en territorio estadounidense.

De acuerdo con documentos judiciales confirmados por medios nacionales e internacionales, la decisión fue tomada por la Fiscalía tras varias revisiones internas y bajo el argumento de que los procesos penales contra los hermanos Treviño Morales avanzarán bajo penas máximas de cadena perpetua. Esto significa que, aunque se les encuentre culpables, no enfrentarán la ejecución capital, un recurso que en Estados Unidos se reserva para casos de extrema gravedad.

La noticia causó impacto en México, ya que los Z-40 y Z-42 son considerados algunos de los líderes más violentos en la historia reciente del crimen organizado. Su nombre ha sido ligado a masacres, secuestros, extorsiones y al atentado del Casino Royale en Monterrey, ocurrido el 25 de agosto de 2011. En aquel ataque, un comando armado ingresó al establecimiento y provocó un incendio que dejó 52 personas sin vida, convirtiéndose en una de las peores tragedias registradas en Nuevo León. Aunque los Treviño Morales no fueron señalados como autores materiales, la estructura criminal que encabezaban, Los Zetas, fue identificada como responsable directa del atentado.

La defensa de los hermanos aseguró que cooperarán con el proceso judicial, mientras que la Fiscalía reiteró que cuenta con pruebas documentales y testimoniales para sostener los cargos. Entre los señalamientos más graves se encuentra el tráfico de grandes cantidades de droga hacia Estados Unidos, así como órdenes de ejecuciones y secuestros que habrían sido autorizados por la cúpula del cártel.

Con esta decisión, el juicio de los Treviño Morales se enfocará en comprobar la responsabilidad de ambos en los delitos imputados, lo que podría derivar en una sentencia de cadena perpetua sin derecho a libertad condicional. Expertos en seguridad destacan que este tipo de procesos refuerzan la cooperación judicial entre México y Estados Unidos, especialmente en casos de capos de alto perfil.

La expectativa ahora se centra en las próximas audiencias, donde se determinarán los tiempos procesales y las pruebas que serán admitidas. Mientras tanto, familiares de víctimas del Casino Royale y de otros hechos atribuidos a Los Zetas han manifestado que esperan justicia plena, aún cuando la pena de muerte no esté sobre la mesa.

La resolución final sobre el futuro de Z-40 y Z-42 podría marcar un precedente en los juicios contra líderes criminales extraditados desde México, y será clave para entender la forma en que Estados Unidos busca sancionar a quienes encabezaron algunos de los episodios más violentos de la llamada “guerra contra el narcotráfico”.